Álbum de fotos de Miguel Herrero
PARTICIPACIÓN EN EL PROGRAMA "SOY EL QUE MÁS SABE DE TELEVISIÓN DEL MUNDO"
"Toda mi vida televisiva de relevancia nació allí, en el plató de Pozuelo de Alarcón junto al Carrefour de Ciudad de la Imagen. Fui la primera persona en enterarse de la existencia de este concurso para una cadena que aún no existía, que era Canal Plus todavía. Un e-mail en la web teacuerdas.com de una redactora abrió el camino. Y lo encontré de casualidad, cuando, de madrugada en el trabajo, entré en esa web. Llamé al teléfono de la redactora a las 7.30 de la mañana cuando llegué a casa pensando que sería un contestador y no, era el particular de la joven. Aproveché el viaje a Madrid para el casting de "Los 4 de 4" para la misma cadena, haciendo este otro casting el día de mi cumpleaños, a mes y medio de nacer el canal. Un test con 10 preguntas sobre clásicos de la televisión como el nombre de las antiguas "Ángeles de Charlie" me hizo sobresalir aquella mañana. Y no supe más hasta la grabación del eterno programa piloto, de tantas horas que nos tuvieron que reservar noche en un hotel cercano porque ya no nos daba tiempo ni a volver a casa a quienes viajábamos de otras ciudades. Imaginé que si había sacado un 10 en la prueba y que se sorprendieron bastante conmigo haría que fuese el primer participante en concursar. Y lo comenté entre los compañeros, con lo cual me gané la sombra de estar enchufado y saber que iba a salir. Nada más lejano de la realidad, sólo intuición. Gané en aquel piloto y nada más supimos de este concurso hasta apenas 10 días de su emisión.
Un plató muy atractivo con unos sillones muy cómodos, un presentador joven y algo perdido en principio, Nico Abad y bastante inexperiencia en el ambiente. Nada quedaba claro, ni las normas ni los premios. Se grababan las dos emisiones del fin de semana seguidas en una mañana con los pertinentes cambios de ropa en nuestra mochila. De nuevo la intuición me dijo que ellos querían que yo saliera a concursar el primero, lo cual no me apetecía puesto que lo bueno era tirarse semanas sin salir para cobrar los 50 euros por día, pasar la mañana y hacerse habitual detrás de los concursantes. Pero no fallé, la voz en off dijo "Jose Antonio Tercero, que se enfrentará a...Miguel Herrero". Allí nacía el Miguel Herrero-personaje. Quiero decir que iba a usar el poco tiempo que teníamos para hablar, para hacer comentarios, para hacer guiños, utilizar mis ironías... Si la pregunta era "¿Quién presenta "Documentos TV"?, me parecía más destacable decir que su presentador, Pedro Erquicia, además había inventado "Informe semanal" en 1973. Porque el programa estaba hecho para la gente que vivía la televisión, la disfrutaba, quería saber datos, devorarla, conocer sus curiosidades. Y porque eso no es ir de listillo, eso es aportar algo a la respuesta, hacerlo diferente. Eso dividió a la audiencia. Para mucha gente me convertí en un ídolo, alguien que sabe muchísimo de la tele y para muchos otros era el pesado de turno, el que nos viene a contar su rollo y ser el protagonista. Pero esa gente no se daba cuenta de que eso era lo que el programa quería. Precisamente por esa razón en cada programa aparecíamos 8 concursantes, 7 eran diferentes y yo siempre estaba ahí. Querían que yo me la jugara siempre pero a mí me enfadaba, siempre estaba en la cuerda floja mientras había un amplio grupo que no iban a salir en un mes y medio porque yo era fijo. Nico Abad fue a "Channel n.4" a anunciar que yo era "la mala bestia" del programa, el indestructible. En la "mesa de teles" encontré a mi gran defensor, a Joan Enric Garde, autor de sintonías televisivas, que me nombraba con gran cariño. Y Nico anunciaba que me habían buscado a otro chico llamado Miguel Herrero para ver quién sabía más de los dos. Me hacía gracia que mientras me ponían verde por los foros de Internet por querer sobresalir, en el programa buscaban a un chico llamado igual que yo sin pasar castings, cosa que no se hizo ni antes ni después con nadie.
En cada programa cambiaba de prueba. Una semana en preguntas de actualidad televisiva y otra en acertar sintonías de espacios televisivos o cantar los propios temas. Me sentaba fatal cantar en público, pero aquí había que hacerlo para ganar. Y para ganar premios como un libro de la abuela de "Cuéntame" o un CD de Natalia de "OT". Mi cara de cansancio se debía a dos razones. Mientras había compañeros que se habían levantado a las 8 de la mañana, cogían el metro e iban al plató a las 9.30 de la mañana, yo había trabajado en Valladolid desde las 11 de la noche hasta las 7 de la mañana y sin dormir iba a Madrid en bus y llegaba a plató a la misma hora que el resto, a las 9.30 de la mañana. Y a veces grabábamos a las 12 con lo que yo llevaba casi un día sin dormir. Y me volvía a Valladolid a última hora de la tarde para trabajar de nuevo, sin haber dormido, de 11 de la noche a 7 de la mañana de nuevo. Y todo por 50 euros (el viaje me costaba 25) y de regalo un libro en el caso de ganar. Ya me empezaba a pasar factura. La otra razón era que no nos ponían maquillaje, cosa que jamás me ha vuelto a pasar en ninguna aparición televisiva y llevo...
Pero pronto noté la popularidad. De ser alguien absolutamente anónimo pasaba a ser reconocido por gente de toda España que pasaba por mi trabajo en la recepción en el hotel, y en la calle, el metro e Internet... En mi pueblo era una especie de estrella para bien o para mal. Empezaron a llamar de los medios. Entrevistas en periódicos como "El día de Valladolid" y "El Norte de Castilla",un reportaje en mi revista preferida, "SUPERTELE" y como máxima cita, el paso por la mesa de "Channel n.4" con Boris,Ana, Pablo Motos, David Ruiz y Joan Enric Garde. Viví esa época como una locura, tener admiradores sólo por saber que el "Un,dos,tres" nació el 24 de Abril del 72 o que la actriz que se metía en Yupi se llamaba Consuelo Molina. Fueron muchos sueños cumplidos, mi teléfono sonaba para hacer mil historias. Pero nunca había salido en la prueba de la publicidad, de la que no me sentía seguro.
Y ocurrió lo inesperado. La gente que llegaba nueva al concurso cuchicheaba que no merecía la pena presentarse porque el premio (ah!,que había premio?) ya estaba dado, para mí. Me resultaba absurdo oír aquellas cosas porque yo sabía que quedaban 7 meses hasta finalizar "Soy el que más..." y no podía ser ni siquiera por tema de trabajo. Cuando me llamaron a participar en la prueba de los anuncios tiré la toalla. No sabía las respuestas pero me las estaban diciendo los compañeros de detrás. Yo estaba enfadado, no quería seguir con un rollo interminable donde pocas cosas se cumplían. Prometían premios como televisiones de plasma que nunca vimos. Por eso, con gran chulería respondía lo que me daba la gana. Quien pueda ver aquel vídeo, que colgaron en la web de Cuatro durante más de un año, sólo necesitaba no decir nada, no responder ya que si contestaba sin estar seguro le daría el punto a mi contrincante. Y eso hizo que ella sumara muchos puntos y yo me fuera. Eso sí, asegurándome un regreso como toda película de terror con secuelas. El mensaje estaba preparado desde hacía dos semanas: "reto a los finalistas a ver quién sabe más... no de publicidad..sino de hisssstoria de la televisión del mundo". Con ello me aseguraba que la productora ideara algo para que yo volviera a final de la etapa y para dejar huella pero no iba en contra de mis compañeros. Mucha gente pensó que era un reto en plan "a ver si el que gane sabe más que yo" y no era así. Se demostraba con el buen rollo que siempre hubo. Tanto que a fecha de hoy seguimos en contacto, quedamos a cenar, son mis amigos.
Después volví al especial de Nochevieja con Carlos Latre, fui de invitado a la gala de los Premios TP (curiosamente al año siguiente volvería como reportero),me siguieron nombrando con ironía cada dos por tres, aparecí en zappings a cualquier hora y regresé a las semifinales, donde pude ganar la primera batalla pero no la segunda. Mientras muchos freakys de medio pelo se entretenían criticándome por foros a última hora de la madrugada a la vez que les crecían los granos frente al ordenador, yo acudí al último espacio de la temporada, como público a animar a los finalistas, a mis compis de público y al ganador, Daniel Chicharro. Fue una etapa inolvidable que aún me recuerdan cada dos por tres en mi vida diaria.
La relación con el programa era irregular. Nos queríamos y nos odiábamos. Un día hacían una mención positiva, otro hacían el gesto de "hisstoria de la tv" con sorna, otro con cariño pero siempre estaba ahí. Lo importante era que hablaran, aunque fuese bien. El cariño se demostró cuando me pidieron hacer un especial en el que me enfrentaría a Florentino Fernández para ver quién sabía más del propio Flo y le gané. Pero poco tiempo después me lo encontré, ya como reportero, en los Premios TP y estaba encantado, le hizo ilusión verme de nuevo. Mi vida televisiva empezó allí y no lo olvido. En mi agenda incorporé nombres como Mila Plaza, Felipe García, Víctor "Poty", Dani Chicharro, Mofly, Marisa Perez "Candy Candy",etc,amigos.Y siempre dije que no soy el que más sabe de televisión del mundo. ¿Acaso le importa a Almodóvar no ser el que más sabe de cine, a Arguiñano no ser el mejor cocinero del mundo o a Alaska no ser la que mejor canta?.Yo soy el que más ha disfrutado con la historia de la televisión del mundo, que nos es poco. Y lo que queda..."
Entrevista a Miguel Herrero en la revista "Supertele"
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